ESCLEROSIS

Consiste en inyectar en el vaso dañado una pequeña cantidad de un medicamento, que en este caso es el polidocanol en forma líquida o en forma de espuma, dependiendo de cada paciente, en el interior de la variz, para que este produzca un daño en la pared del vaso afectado y consigamos así su desaparición.

Se trata de una técnica sencilla en la que la persona puede incorporarse inmediatamente después a su actividad habitual.

Las concentraciones que usamos en medicina estética son mínimas por ello los riesgos también lo son, siempre que la técnica se realice de forma correcta.

Durante el tratamiento las molestias son debidas al pinchazo producido por un aguja muy fina y el escozor del líquido cuando penetra, ambas cosas son totalmente tolerables.

Posteriormente se colocan unas medias de compresión o en su defecto un vendaje compresivo, que se debe llevar al menos 24 horas después para luego mantener las medias de compresión durante el día hasta la siguiente sesión.

La frecuencia y el número de sesiones van a variar en cada paciente.

Se recomienda evitar la exposición solar durante todo el tratamiento por eso suele realizarse durante el invierno, para evitar riesgos.